Profesión: Viajero. ¿Se puede?

Hoy escribe Gaby

Siempre me fue muy complicado responder a la pregunta “¿Cuál es tu profesión?”.

Optaba por contar que hacía de mi vida. Estudié dirección de cine, pero no me creo director. También estudié dirección de fotografía, trabajé haciéndolo y me encanta, pero tampoco me creo un director de fotografía. No basta con tener un título, creo que para ser algo, hay que estar haciéndolo constantemente.

Cuando le dimos inicio al viaje, pensé que ya estaba resuelto. De ahora en más, cuando me pregunten mi profesión, voy a decir Viajero!

Peeerooooo

En Bolivia, en pocos lugares dormimos dentro de la Kangooneta, no encontrabamos ningún lugar que sea seguro y que nos dejen estacionarla para dormir. Asi que tuvimos que ir en busca de alojamientos pagos (económicos).

Antes de ir a la habitación, hay que pagar, presentar los pasaportes y registrarse. Normalmente esto último lo hace Flor. Pero en el hotel de Cochabamba, el más barato por ahora y de los más prolijos, el que completaba los datos era el recepcionista. Casi sin mirarme me pregunta la profesión. Sin dudarlo, le dije: VIAJERO. Levanta la vista y me dice que eso no es una profesión. Ah no? Y me dijo que no, que si no tengo profesión, se pone estudiante.

Lo pensé y dije que si, que era estudiante. El empleado del hotel con eso se quedo contento, y yo también, porque me hizo dar cuenta que lo soy.

Qué es un estudiante? Alguien que está aprendiendo. Ser viajero es eso, es estar en constante aprendizaje. Por ejemplo, en ese instante en Cochabamba aprendí cuál era mi profesión.

Quiero eso prara mi vida, no dejar de ser estudiante nunca de esta carrera tan complicada. Recibirse de viajero no se puede. Eso implicaría que uno ya sabe viajar, que ya no hay más por descubrir, y lo veo muy complicado.

Todavía no llegamos a los dos meses de este viaje por América y ya me estoy dando cuenta que en este primer cuatrimestre no voy a poder aprobar las materias, ya se que necesito más tiempo de viaje.

Cada día que llegamos a un lugar nuevo aprendemos, cada vez que vamos por una calle nueva aprendemos y ni hablar cuando conocemos gente, ahí es dónde más aprendemos! También es muy importante aprender de las cosas que no queremos y de lo malo, eso es lo mejor para que nos vaya súper bien.

Cuando dejamos Buenos Aires pensé que ya había aprendido a no atarme a las cosas materiales. Pero el viaje es en auto, algo material! Ahora estoy escribiendo en un bus, esto me hace dar cuenta que seguimos aprendiendo. Viajar en auto es algo hermoso, pero también está bueno darse cuenta que es un medio, que a veces conviene dejarlo y optar por otro transporte.

Puf! Que linda que es la vida, que lindo que es ser estudiante!!